El café es una bebida milenaria cuyo consumo se ha extendido por todo el planeta hasta quedar asociada a las creencias, religiones y supersticiones más dispares con el paso de los siglos. Y es que esta bebida tiene una extraña capacidad para conformar costumbres con un carácter casi ritual. Aunque nuestros cafés “sagrados” de la mañana y nuestras pausas para “echar un café” con los compañeros de trabajo no estén asociadas a ninguna creencia espiritual, bien mirados, no dejan de ser pequeños rituales que procuramos no saltarnos de ninguna manera.
Pero ¿qué significado tiene el café para otras comunidades? ¿Qué propiedades espirituales se le atribuyen en otras culturas? Aunque la lista es larga —tanto que sobrepasa con mucho la extensión de este artículo— hemos reunido aquí algunos ejemplos:
Ritos
En la mayoría de los países productores de Sudamérica las comunidades que cultivan el café de forma tradicional celebran fiestas asociadas a las distintas fases de crecimiento de la planta. En Colombia, por ejemplo, la aparición de las flores blancas del cafeto es un momento que muchas parejas escogen para celebrar sus bodas, pues en esta época los campos se vuelven blancos y el aroma de las flores impregna el aire. Este periodo, además, es muy corto (las flores caen en cuestión de días), por lo que son fechas de gran actividad en las comunidades cercanas a los cafetales. El café, en definitiva, marca un calendario de festividades a lo largo de todo el año. En Colombia, origen de algunos de los mejores cafés del mundo, este producto tiene tanta importancia que existen una fiesta nacional del café, además de otros eventos como el carnaval del café. En otros países productores vecinos tienen festividades similares.
En Etiopía, de donde es originario el café, la preparación de la bebida es un ritual, de manera parecida a como en algunos lugares de Asia lo es la preparación de té. Aquí a la ceremonia la llaman Buna y es de tipo comunitario. Los granos se tuestan in situ en un brasero, ante los invitados, usando para ello una sartén de mango muy largo conocido como menkeskesha. Los etíopes entienden (y no les falta razón) que el disfrute del café comienza con el deleite que produce el aroma del tostado. Luego, los granos se muelen en un mortero y se infusionan en una cafetera de arcilla negra conocida como jebena. En total se beben tres rondas de la bebida, cada vez menos intensas, conocidas como abol, tona y baraka. En la vecina Eritrea existe un ritual muy similar.
Esoterismo y religión
Como ya contamos en este post, el café saltó del cuerno de África al Yemen en el siglo XV; allí, pronto quedó asociado a los rituales de meditación sufíes. Los monjes yemeníes, que se cree que fueron los primeros en elaborar café de forma parecida a como lo hacemos hoy en día, utilizaban la bebida para mantenerse despiertos y concentrados durante sus larguísimas sesiones de meditación. El café pasó así a ser considerado una forma de preparar el cuerpo y la mente y, por lo tanto, una parte más del ceremonial.
En otros lugares, la cafeomancia ha quedado asociada por sincretismo a ciertas religiones. La cafeomancia es la adivinación a partir de los posos del café. Según esta práctica, las personas iniciadas pueden leer el futuro en los patrones que forma el café en el fondo de una taza. Es un ritual practicado por algunas comunidades cristianas ortodoxas y turcas.
En Brasil, existe un culto religioso de origen afrobrasileño conocido como Umbanda. Sus creyentes elaboran una bebida de carácter sagrado que se prepara con café, leche y hierbas rituales y se sirve en ofrenda a unas divinidades conocidas como orishas. Después, se consume como símbolo de purificación y protección espiritual del creyente.
Supersticiones
Hay tantas supersticiones relacionadas con el café —y eso sin irnos lejos— que no podríamos enumerarlas aquí todas. No obstante, puede que estas sean las más extendidas.
- Da buena suerte llevar un grano de café en la cartera.
- Derramar un poco de café atrae la suerte, pero derramar la taza entera es mal asunto.
- Para no tentar a la mala suerte, el café debe ser servido con la mano izquierda
- Al tomar café solo, invocaremos la fortuna si recogemos con la cucharilla las pequeñas burbujas que se forman en la superficie.
