Nos encanta la posibilidad de mezclar ingredientes y combinar sabores, siempre que el café esté entre ellos. Pero, ¿y si hablamos de texturas? Esta Granola Coffee recoge ambos requisitos en una sola cucharada: un toque crujiente y un sabor cautivador. Créenos cuando te decimos que será parte de tus desayunos y meriendas, a partir de ahora. ¡Toma nota de la receta!
La clave está en elegir bien el café
La granola tiene de por sí un sabor peculiar, que variará en función del mix de frutos secos y cereales que vayamos a utilizar como base. Por eso, antes de nada, es muy importante pensar bien en el café que seleccionaremos y en los matices que queremos que este aporte. Tómate tu tiempo, no hay prisa.
Nuestra recomendación es que empieces probando con uno más suave y vayas aumentando la intensidad, hasta encontrar el punto que buscas; o que, directamente, elijas el que más te guste. Eso sí, cuando lo escojas, ten en cuenta el sabor de boca que quieres dejar y no te olvides de las
características que influirán en el retrogusto.
Los ingredientes de esta Granola Coffee
Según la cantidad que quieras cocinar, podrás multiplicar las cantidades. Pero si vas a hacer una prueba, te aconsejamos que comiences con estas:
- 3 tazas de copos de avena integral
- 1 taza de avellanas
- ¼ taza de semillas de linaza
- 1 cdta. de canela molida
- 2 Cdas. de café molido
- Una pizca de sal
- 1/2 taza de sirope de agave o miel
- 2 Cdas. de aceite de coco o de oliva virgen extra
- ¼ taza de café expreso
- ¼ cdta. de esencia de vainilla
Recuerda que la base de la granola es una mezcla que puedes modificar a tu gusto. Cambia las avellanas por almendras, añade pistachos, uvas pasas… ¡Prueba tu propia versión! Y si quieres hacerla más especial, puedes añadir
nuevos aromas, pero sin empañar nunca el protagonismo del café. ;)
¿Cómo le damos forma?
¿Has apuntado ya todos los ingredientes? Pues la preparación es así de fácil:
- Precalienta el horno a 180º y forra una bandeja grande con papel vegetal. Mientras, añade todos los ingredientes secos en un mismo bol y prepara la taza de espresso (aquí te dejamos 5 reglas para que te salga perfecto).
- En un cazo aparte, calienta todos los ingredientes líquidos (sirope de agave o miel, aceite de coco u oliva virgen extra, café expreso y la esencia de vainilla) durante un par de minutos. Si quieres, puedes hacerlo también en el microondas.
- Una vez caliente, derrama la salsa sobre el bol con la mezcla de cereales y frutos secos, y revuelve hasta que esté todo bien impregnado.
- Vierte la granola sobre la bandeja de horno ya preparada y extiéndelo bien en una sola capa, intentando no dejar huecos.
- Hornéalo a 160º durante 20 minutos aproximadamente. Cuando hayan pasado 10 minutos, abre el horno y remueve la granola para que se tueste de manera uniforme.
- Saca la bandeja del horno y deja que se enfríe, para que quede más crujiente.
Para conservarla en buenas condiciones durante un par de semanas, guárdala en un bote hermético, preferiblemente de cristal.
Versatilidad, para acompañar
Lo mejor de esta receta, además del café, es su versatilidad. Puedes servirlo tanto en el desayuno como en la merienda y acompañarla de muchas maneras. Funciona genial con un yogur cremoso, con leche, con frutas e incluso puedes darle forma de snack, para acompañar con un delicioso té o una buena taza de café.
Sin duda, esta es una receta hecha para coffee lovers, que podrás ir perfeccionando con el tiempo y que te permitirá exprimir toda tu creatividad. ¡Ve trabajando en tu versión y después nos cuentas!
